¿Quieres lucir un bronceado perfecto, pero no encuentras los productos ideales que lo consigan? Duet te presenta algunos trucos para elaborar un bronceador casero sin la necesidad de exponerte al sol.
Las propiedades del té negro son conocidas en su mayoría como una infusión, sin embargo, los beneficios que te otorgan van más allá. Es perfecto para eliminar espinillas, granos, para el cabello y en este caso también para broncearse.
Para este bronceador natural necesitarás un litro de agua y 15 bolsitas de té negro. Una vez que se haya concentrado el té, coloca el líquido en un pulverizador y rocía las zonas de tu piel que quieras broncear. Déjalo actuar por unos minutos, seca tu piel y ya podrás usar tu vestido o shorts favoritos luciendo tu nuevo bronceado.
Para preparar este autobronceador necesitarás:
– 20 ml de aceite vegetal de zanahoria.
– 10 ml de aceite vegetal de nuez de albaricoque, rosa mosqueta o jojoba.
Primero tendrás que limpiar la zona en donde vas a aplicar el bronceador y masajearla, luego aplica en la mañana o noche el producto y finalmente retira los excesos con una toalla.
– Zanahoria, miel, limón y aceite de oliva
Coloca en una licuadora dos zanahorias cortadas en trocitos, añade tres cucharadas de aceite de oliva, dos cucharadas de zumo de limón y una cucharada de miel. Una vez que se haya formado una pasta fina, guárdala en un recipiente de cristal. Antes de aplicar, agítalo bien.
Recuerda almacenar este bronceador en un ambiente fresco, de preferencia una refrigeradora para evitar que se estropee con el calor.
Aplica estos trucos y cuéntanos cuál fue tu resultado.
Con microesferas exfoliantes y extracto de miel de abeja
Con extracto de leche y almendras
Con lanolina y glicerina
Con extracto de guaraná y té blanco