Muchas veces acudimos a productos muy costosos que encontramos en los supermercados para resolver problemas de nuestro cabello y piel, sin darnos cuenta que la solución podría estar en productos que tenemos en casa. Sigue estos tips que te trae Duet para conseguir un cabello y piel saludable.
El aceite de coco se ha convertido en un elemento popular y necesario por sus usos cosméticos y medicinales, principalmente por contener ácidos grasos y vitaminas cuando se prensa la pulpa de esta fruta. Es utilizado en muchos productos para el cabello debido a que:
– Es perfecto para el cuidado del cabello porque lo hidrata, recupera el brillo y su volumen.
– Fortalece las fibras capilares y previene la caída del cabello.
– Es ideal para el cabello seco por su elevado contenido en grasas pero también sirve para rizados o dañados.
– Ayuda a nutrir los folículos pilosos, por lo que promueve el crecimiento capilar.
Para el rostro, es utilizado para restaurar la hidratación del cutis o prevenir la aparición de las arrugas, por lo que usar el aceite de coco puro y extra virgen es ideal para pieles secas. Para esto, solo tienes que colocar unas pequeñas gotas sobre tus dedos y aplicarlas sobre la cara mediante suaves masajes circulares.
El aceite de almendras tiene similares propiedades debido a que cuenta con ácidos grasos como el omega 3 y 6, por lo que tiene mayores aplicaciones cosméticas y ayuda en algunos problemas de la piel como son los eccemas o el acné. Se puede emplear para hacer masajes o para uso externo, aunque no está recomendado para el consumo.
– Es excelente para personas que tienen el cuero cabelludo seco debido a que, al contener una buena cantidad de vitamina E, otorga suavidad y brillo una vez que se usa.
– La misma vitamina E ayuda a mejorar el aspecto de la piel y la mantiene tersa, suave y radiante, además de ser ideal para tratar problemas relacionados al acné.
Sin duda, muchos de los productos que disponemos en nuestro hogar nos pueden ayudar también con el cuidado de nuestra piel y cabello. Anímate a probarlo y cuéntanos cómo te fue.
Con microesferas exfoliantes y extracto de miel de abeja
Con extracto de leche y almendras
Con lanolina y glicerina
Con extracto de guaraná y té blanco